El día de ayer estuve en la pensión, he conversado harto y he conocido gente muy interesante, algunas mas que otras. También me he dado cuenta de algunas cosas que quizás no quería darme cuenta, pero bueno, ya era hora quizás de que mi escepticismo afectara de cierta manera mi ingenuidad juvenil (si, aun soy joven, y me siento joven... o por lo menos debería ser así)
Estaba pensando... que difícil es estar tan lejos de tu familia, tu hogar, tus cosas, amigos, etc.; para llegar a un lugar nuevo, totalmente desconocido y con muy pocas esperanzas, mas que demostrar que mereces el puesto y el lugar al cual has llegado.
Con el tiempo uno tiene que conocer personas, comenzar a relacionarse, porque al fin y al cabo no serás la especie de ermitaño que se queda en su lugar de descanso todo el día y que intenta en lo posible no relacionarse con nadie porque cree que no encaja en esta nueva vida; bueno, yo si creo que encajo, solo que algunas cosas que hacía, gustaba y vivía con total devoción... ya no me causan una mayor atracción, o quizás las he dejado de lado para tratar de encajar mejor, no sabría que responder.
El hecho es que he cambiado, la pregunta es si para bien o para mal, creo que eso se verá en el camino, me hes díficil darme cuenta, pero parece que he quedado chico en un lugar demasiado grande, no se si será la mejor forma para expresarme, pero algo así es lo que me sucede.
Ahora parece que salgo un poco más, tambien estudio (palabra desconocida para mi hasta hace algunos meses... marzo si mal no recuerdo), tengo mas amigos al parecer, conozco a mucha gente simpática, algunas mas que otras :P.
Una niña en especial, me ha ayudado mucho a olvidar a personas algo desagradables que quedaron en rancagua... y sin tener una relación nada especial, me hace sentir extremadamente cómodo, comfortable, feliz, era todo lo que necesitaba para que esta nueva etapa fuera perfecta.
Ahora simplemente, puedo respirar aires nuevos.